lunes, 15 de febrero de 2010

Contentas estarán las hadas







El parque es de todos. 
Por eso, los viejos cogen del nogal las nueces, aún verdes y amargas, para nada, los niños arrancan ramas a los árboles mientras sus padres, aburridos de vivir, fuman Marlboro acodados en los bancos y tiran las colillas al suelo y, con la punta de la Panama Jack, las entierran; son muy limpios. Las marujas de los perros, en otoño y en invierno, no recogen las cacas y los jardineros arrancan los rosales enfermos, que curarlos es muy caro, y plantan híbridos de Holanda, feos como Picio, pobre Picio, ¿me perdonas?. Antes, el jefe de jardineros, con su moto y su casco de La Hormiga Atómica, se acercaba a preguntarme un tratamiento para ácaros, qué era ese amarronamiento en las pináceas o la conveniencia de usar aceite de invierno. 


Una mierda de todos: El parque es mío, y de mis perros; conozco en que parte del tronco tiene una herida esa conífera, la que froté con polvo de canela para que no se pudriera, sé que semana del año tirará las hojas el sauce llorón de la izquierda, padre sauce, a la orilla del río en verano, siempre dispuesto a ayudar.
En que parte oculta del río pasan el frío los cormoranes y a cual llegarán las grullas azules a criar.
Donde están los círculos de hierba de las hadas, a plena vista en la chopera, que a los seres humanos les plantas a ET en medio de El Corte Inglés y no se enteran, se piensan que es un enano, o un niño disfrazado, que estamos en carnaval, otro cubalibre Baltasar. 

Nada es más tuyo que la tierra marrón y helada que cada día pisas, ni el piso que no es tuyo, es del banco, ni el plasma que en 4 años estará viejo o se te hará pequeño, o estará roto. Ni tus hijos, esos menos que nada, que los tienes de prestado hasta el día en que se dan cuenta de que su vida es suya y te sacan la lengua, hacen la maleta y se marchan encoñados con una punkarra fumada, de la que lo mejor que puedes decir es que tiene todos sus tatuajes escritos con buena ortografía y tú que estabas convencido de que la solución a todos tus problemas era el colegio de pago.

Voy subiendo la cuesta jugando con pelotas y palos, mirando al suelo y jadeo y me río y a lo lejos oigo máquinas y alguien grita: ¡Árbol va! y levanto la vista y oye tú, era verdad, árbol iba. Se me congela en el jeto la sonrisa. Supongo que esto es lo que pasa cuando se elige como alcalde a un ginecólogo. Aunque no puedo dejar de pensar que seguro que es mejor eligiendo como emplazamiento de un nuevo puente sobre el río una chopera, aunque la nueva carretera no vaya a dar a parte alguna, a barrio alguno ni a congestión circulatoria alguna, que entre las piernas de una impúber en su primera revisión pélvica.

Estoy rabiosa, tengo ganas de coger la caldera y salir esta noche a escondidas, en la helada, con el frasco de jengibre, a la chopera. Buenas estarán las hadas, sus círculos de hierba pisados por las palas y las máquinas, llenos de colillas de los obreros búlgaros y pelotas de papel Albal que guardaron bocadillos de chorizo de la matanza casera, qué ricos que están los chorizos, ñamñam.

Me voy a merendar tostadas con sobrasada, que a las 5 de la mañana hace frío...
 
La chopera ya no está 

 

5 comentarios:

  1. Seguro que has descargado toda tu rabia e ira en este post, que, al menos a mí, me ha hecho pensar.
    A veces, nos sentimos Quijotes luchando contra molinos de viento.
    Un beso y feliz día.

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  2. Yo tb uso canela para mis árboles, sé lo q se siente cuando la frotas suavemente en los cortes q acabas de podar para evitar que algo les haga daño, así q te entiendo. Maldita manía de destruir lo único que nos puede dar oxígeno en esta vida de locos
    Besos amiga

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  3. Ya se sabe, lo que es de todos, no es de nadie. Lástima.

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  4. "Nada es más tuyo que la tierra marrón y helada que cada día pisas..."

    Muy cierto, y la que algún día nos acogerá.

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  5. RAMPY
    A gusto me he quedado, sí.
    Un beso.
    Gata
    Muy fuerte lo de la chopera. La canela es genial, la descubrí este otoño cuando me regalaron una orquidea.
    Un saludo :)
    Dad
    Me encanta verte por aquí. Te leo pero, como me pasa con otros bloggers no te comento. Tus post son de esos que son redondos tal cual.
    Un saludo.

    Busca
    Beso :)

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